Marcha y exigencia de justicia por Juan Cardozo: “Nos dicen que falta una carpeta”, denuncia su hermana a 8 meses de la tragedia

Las frases son simples, pero desde su simplicidad expresan mucho. ‘Justicia por Juan’, ‘Queremos saber qué paso con Chigua’. Se refieren a Juan José Cardozo Silvera, oriundo de Sarandí Grande.
Son jóvenes que compartieron la vida de Juan y con Juan hasta hace exactamente 8 meses, cuando falleció de forma instantánea en un siniestro de tránsito ocurrido en la zona del Liceo Faustino Harrison. En aquel insuceso trágico participó un vehículo que era conducido por una mujer de mediana edad, oriunda de nuestra ciudad.
“No nos han dado ninguna respuesta”, dice Patricia Cardozo, la hermana del joven fallecido.
Este viernes a la noche el frío fue testigo de una marcha silenciosa que partió desde Plaza Pisón y recorrió el centro de la ciudad, culminando en las letras identificatorias de Sarandí Grande.
En silencio, con la emoción a flor de piel, la familia y los amigos de Juan le recordaron a todos que aún siguen aguardando una expedición judicial y que para nada les conforma la respuesta oficial de que “aún falta una carpeta”.
En diálogo con FM Digital, Patricia dice “hoy estamos en esta marcha en nombre de Juan porque hoy hace 8 meses del accidente y no hemos tenido respuesta de parte de Fiscalía, nos parece que es una investigación que está demorada. Nos dicen que falta una carpeta, es la respuesta que tenemos cada semana cuando nuestro abogado va a consultar”.
¿Es posible? ¿Puede una carpeta extraviarse o demorar tanto?
El abogado de la familia, con estudio en la ciudad de Rivera y en Montevideo, recibe siempre la misma respuesta ante el petitorio. “No sabemos si es posible, nos dicen que estos casos pueden tardar pero ya 8 meses es demasiado”.
La familia y los amigos entienden que la visibilidad que se le pueda dar al caso contribuirá a forjar cierta presión sobre los actores públicos que hoy deben responder y trabajar en la situación.
“Vamos a empezar a movilizarnos, hoy es acá en nuestro pueblo, quizás la próxima vez estemos en Fiscalía haciendo lo mismo, movilizados y en marcha, siempre con respeto. Lo que queremos es un final para este caso, que no quede archivado como que no pasó nada porque sí pasó. Queremos respuestas, saber qué pasó ese día, lo que sea que deba ser pero que no quede un caso archivado”.
Las voces quebradas de las amigas, los nervios de los amigos al leer, las lágrimas de su hermana, el apoyo de los familiares. Cuando no hay fuerza en los padres de Juan, debe surgir ésta desde otros ámbitos, y es allí donde aparecen los más jóvenes que guardan la memoria de Juan.
“Él era un chico tranquilo, le gustaba la moto. No faltaba el respeto a nadie, conducía bien porque eso dicen sus amigos. Salió un día de la plaza a dar una vuelta con una amiga y no regresó a casa nunca más”, cuenta Patricia.
Consultada sobre si existió alguna forma de acercamiento de la otra parte interviniente en el siniestro, la hermana del joven fallecido responde rápidamente que no. “Jamás. Eso también duele, no tengo mucho que decir sobre esa otra parte”.
En Sarandí quedaron unos padres que nunca más van a recuperar la alegría, hermanos, amigos, “esto duele para toda la vida, duele demasiado y no hay consuelo para esto”. Patricia promete seguir adelante, buscando encontrar justicia por Juan, por Chigua.